acupuntura-orgon.com.ar
medicina energética

 

Inicio

English 

Deutsch

Presentación 

Esta medicina 

Revi al natural

Investigaciones

Historias 

Programa Azul 

Viaje 

Desintoxicación

Diccionario 

Cerebros  

Para qué sirve

Sociedad

Mapa

Concierto

Funciones

Estadística

Mediciones

Revitalización

Glosario

Enlaces

Plantas

Articulos

Chicos

Acu-Orgón

Gripe porcina

Viagra, Hierbas Chinas

Experimento de Alcoy

Limpieza Hepato-Biliar

Programa de Desintoxicación

La gripe

El Invierno

Los Hidrolizados

Los acumuladores de energía orgón

El Dor-Buster

La Primavera

Cielito Lindo I

Acupuntura estética

La revolución Reich

Talleres

La medicina catastrófica

Los bebés orgónicos

Orgón y Dor 

La Clonación de Idiotas

Revitalización y Envejecimiento

Talleres 2015

El magnesio 

La manta de orgón 

La medicina moderna

Andropausia







 

 



Cuaderno de Navegación

3. ¿Qué se propone esta medicina?

Dos cosas: lograr un diagnóstico acertado y un tratamiento eficaz.

El diagnóstico tiene dos objetivos básicos: la investigación de la energía y la exploración de órganos y funciones. De ninguna manera excluye la utilización de los métodos habituales de investigación en la medicina interna nacida en occidente: laboratorio, rayos, ultrasonido, etc. Pero más allá de la información que estos datos suministran, se intenta comprender la personalidad o estructura energética que los alberga. Y esto sólo es posible cuando se avanza en el conocimiento del sistema vivo denominado "paciente" desde otro sistema vivo más conocido como "el médico". 

Se ha elegido como guía para abordar esa intimidad el estudio de la energía a la usanza de la medicina tradicional china o acupuntura. En este aspecto importa conocer no sólo la cantidad promedio de energía que tiene una persona, sino también las características de su distribución. Ambos datos resultan decisivos a la hora de preguntarse la razón por la cual se presentan determinados síntomas o enfermedades.

Podrá verse que la investigación energética apunta a conocer las características globales de la persona estudiada y, por lo tanto, su funcionalidad como sistema. El estudio de "las partes" (órganos) importa en función del conjunto (sistema). 


Ésta es la razón por la cual el proceso diagnóstico demora dos sesiones, y sólo se altera cuando la urgencia de alguna situación (dolor agudo, etc) obliga al tratamiento inmediato. Pero siempre que sea posible es mejor hacer el diagnóstico completo, ya que la cantidad y la calidad de la información abren la posibilidad de un tratamiento mucho más profundo que la simple persecución de síntomas. 

Y aquí no hay más remedio que señalar una realidad bastante desagradable: casi la totalidad de la acupuntura que se practica en nuestra cultura es de características sintomáticas. Simplemente se atacan las manifestaciones de la enfermedad ratificando el diagnóstico de origen (úlcera, asma, artrosis, etc.)  y utilizando técnicas y recetas de puntos que la tradición de la acupuntura ha encontrado eficaz a lo largo de los treinta siglos de historia que tiene. 

De ninguna manera es incorrecto utilizarlas, pero sí lo es (y hasta roza la deshonestidad si puede evitarse) reducir la acupuntura a esta sola utilización escamoteando al paciente y a la medicina la posibilidad de acceder a un diagnóstico y tratamiento sistémicos. 

Así manejada, la acupuntura no implica ningún aporte trascendente a la cultura médica estándar. Se acepta el mismo planteo mecanicista de la medicina vigente y se emplean los puntos de acupuntura como si fueran botones mágicos que logran bajarle el volumen a dolores y otras molestias. Para los pacientes de estos acupunturistas (poco importa que sean o no médicos) la aguja de acupuntura es nada más que una aspirina de acero inoxidable. Así, la única ventaja es que estos pacientes se intoxican bastante menos que con las granadas de boca (analgésicos) y los bazucazos (anti-inflamatorios).

Los órganos y sistemas biológicos también se investigan, sólo que con una metodología poco convencional: a través de los puntos de acupuntura con los cuales tienen una estrecha relación.

 

Ambos enfoques, el estudio de la energía y el rendimiento de órganos y sistemas, permiten una idea razonablemente completa acerca de las características estructurales y funcionales del paciente (persona con la paciencia necesaria para esperar el resultado del estudio). La articulación de ambos enfoques logran la formulación de dos tipos de diagnóstico: el de estado (energético) y el de órganos (estructuras y funciones predominantemente alterados).

A partir de esta síntesis puede diseñarse un plan terapéutico enfocado a mejorar el estado energético y la funcionalidad de los órganos.

Para esta medicina el devenir natural de la mayoría de las enfermedades tiene tres escalones sucesivos: el primero es un desequilibrio energético. Si éste se consolida dará origen a un disturbio funcional, el cual a la larga evolucionará hacia una alteración de la anatomía, ya sea reversible o irreversible.

Ahora podrá comprenderse la razón del estudio emprendido: el objetivo principal del tratamiento es acercar al paciente al mejor de los estados posibles para sus propias posibilidades de desarrollo. Y esto implica lograr alterar la trama del argumento que tiende a enfermarlo cada vez más. Los síntomas juegan un papel secundario: tienen valor como pista, indicio, reclamo. Pero no constituyen la enfermedad. Se los trata frontalmente cuando son muy limitantes o molestos, pero habitualmente se espera su desaparición a partir de una mejoría real del bio-sistema.

Por otro lado, cuando el tratamiento funciona realmente bien los síntomas que originaron la consulta empiezan a ser sucedidos por otros que son históricamente anteriores. Es curioso ver como la prestigiosa Ley de Hering de la homeopatía se cumple casi rigurosamente: las enfermedades se curan desde el presente hacia el pasado, de arriba hacia abajo y desde la profundidad a la superficie.

Es como si el "proceso enfermante" pugnara por "salir hacia el exterior", y retrocediera a un nivel menos comprometido para la vida y funcionalidad del afectado. Y como si la persona fuera descascarándose al mejor estilo cebolla, pero no necesariamente con la misma obligación del llanto. Por otra parte, cuando este proceso se va desarrollando ( y la persona se DES-ENROLLA ) los síntomas del pasado no suelen presentarse con la misma virulencia y persistencia.

 

Todo esto hará comprender que es difícil fijar tiempos estrictos para la necesidad de cada persona, palabreja que se las trae debajo del poncho ya que su significado original es el de "máscara del actor"...

Además, éste es un tratamiento implacablemente respetuoso de la naturaleza y sus tiempos, de manera que será posible asistir a buenas respuestas y posteriores recaídas, las cuales son cada vez menos importantes si el tratamiento es exitoso. Pero no deben (o deberían) desanimar cuando se presentan, a menos que se pretenda no un tratamiento médico sino magia de la peor.

   

Entonces parecerá elemental pero hay que decirlo: el objetivo de este tratamiento es aumentar la vitalidad de una persona (su lado luminoso) ayudándolo a des-enfermarse (su lado oscuro) y dejando que logre emerger hasta donde sea posible el proyecto original de su vida: cierta felicidad que se pone tonto explicar con palabras. Es que acercarse a una situación de autorregulación energética es un concepto muy cercano al de lograr un importante nivel de libertad. 

El objetivo de conseguir que la energía fluya con la menor cantidad posible de obstáculos es un sabio ideal que la medicina china aporta al conjunto de la comunidad humana y que no debería ser desechado. Implica preguntarse qué cantidad y calidad de energía recibe o incorpora uno cotidianamente (desde los alimentos, el aire y los afectos hasta los mensajes de los medios, etc.), cómo la transforma y la distribuye (metabolismo, eje neuro-endocrino, circulación) y finalmente cómo la expresa o descarga, (movimientos, gestos , palabras, actos de amor o de odio, deposiciones, creación o repetición, construcción o destrucción). 

En cuanto al tratamiento, es importante saber que el primer protagonista es el propio paciente (es literalmente así, sin demagogia), el segundo es el médico y también hay muchos otros en parte conocidos y en parte ignorados.

Si uno piensa que su rol en este argumento consiste en ir al consultorio a exponer pasivamente su cuerpo, es mejor que desista de esta expedición. En cierto sentido, éste es un viaje de aventuras al interior del ser, a la intimidad del funcionamiento, a las sensaciones y emociones primarias. Algún día podrá hacerse simultáneamente con un enfoque psicoterapéutico asociado a la misma mirada, ya que el objetivo es integrar órganos, funciones, emociones, historia personal.  

Pero el desafío para el paciente permanece: si se logra trascender la enfermedad o aminorarla, entonces habrá que encontrar algo hermoso y útil en lo que poner la energía ganada al desierto.

sigue a Capítulo 4: Procedimientos diagnósticos
a Cuaderno de Navegación
a Inicio

 

horizontal rule


Medicina energética

Inicio / Presentación / Esta medicina / Revitalización al natural / Investigaciones / Historias / Programa Azul / Viaje / Desintoxicación / Diccionario / Cerebros / Para qué sirve / Sociedad / Mapa / Concierto / Funciones / Estadística / Mediciones / Revitalización / Glosario / Articulos / Enlaces / Morir como chanchos / Chicos / Plantas / Acupuntura-Orgón / English / Deutsch / Talleres / Viagra, Hierbas chinas / El experimento de Alcoy / Limpieza Hepato-Biliar / Programa de Desintoxicación / La Gripe / El Invierno / Los Hidrolizados / Los acumuladores de energía orgón / El Dor-Buster / La Primavera / Cielito Lindo I / Acupuntura Estética / La revolución Reich / La medicina catastrófica / Los bebés orgónicos / Orgón y Dor / La Clonación de Idiotas  / Revitalización y Envejecimiento / Talleres 2015 / El magnesio / La manta de orgón / La medicina moderna  /  Andropausia

Dr. Carlos Inza / Salguero 1807 - 11A / CP 1425 Buenos Aires - Argentina / Tel-fax: (011) 4822-5946  
           acupuntura.orgon@gmail.com
                 acupuntura_orgon@yahoo.com.ar